El Servicio de Prevención y Lucha contra Incendios Forestales (SPLIF) informó que el incendio registrado en el sector del cerro Runge, fue completamente extinguido luego de varias días de intenso trabajo en terreno. El foco había generado preocupación por desarrollarse en una zona de interfase, donde el ambiente forestal convive con sectores urbanos, aumentando el riesgo para viviendas y personas.
Desde el organismo provincial remarcaron que el siniestro atravesó todas las etapas del combate: tras el ataque inicial -el día sábado-, el fuego fue controlado, pasó a fase de liquidación y finalmente se logró su extinción definitiva mediante tareas de enfriamiento profundo y monitoreo constante del perímetro afectado, para evitar posibles rebrotes.
El carácter de incendio de interfase le imprimió mayor complejidad al operativo, ya que las condiciones del terreno, sumadas a la cercanía con áreas pobladas, exigieron una respuesta coordinada y rápida. En ese contexto, el SPLIF volvió a advertir que una sola chispa es suficiente para desatar un incendio grave, especialmente en escenarios de altas temperaturas, viento y vegetación seca, condiciones que se repiten con frecuencia en Bariloche durante la temporada estival.
En el operativo participaron 20 brigadistas del SPLIF, incluidos integrantes de la guardia a presto, junto con la brigada motorizada de la Policía de Río Negro (7 efectivos). También intervinieron Seguridad Vial, con 3 móviles y 7 efectivos, y distintas dotaciones de Bomberos Voluntarios: Ruca Cura (6 voluntarios y 2 cisternas), Melipal (3 voluntarios), Centro (5 voluntarios) y Campanario (6 voluntarios y 2 móviles).
A ese despliegue se sumaron equipos de Protección Civil, con 7 personas afectadas al operativo, y personal de Tránsito municipal, con 5 inspectores, que colaboraron en el ordenamiento del sector y la prevención de riesgos adicionales durante las tareas de combate.
Una vez controlada la situación, desde el SPLIF insistieron en la necesidad de reforzar la prevención, especialmente en zonas forestales y de interfase urbana. En ese sentido, se recordó a la población evitar el uso de herramientas que generen chispas, no realizar quemas bajo ninguna circunstancia y extremar los cuidados al circular o trabajar en áreas con vegetación seca.
Asimismo, se solicitó denunciar de inmediato cualquier columna de humo o indicio de fuego a los canales oficiales, ya que la detección temprana sigue siendo una de las herramientas más eficaces para evitar incendios de gran magnitud. En una ciudad rodeada de bosque y con creciente presión urbana sobre el entorno natural, la prevención vuelve a ser la primera línea de defensa.
