Una adolescente recibirá una cuota alimentaria que se actualizará periódicamente, tras el acuerdo alcanzado entre sus padres —ella y su madre residen en Chile, mientras que el padre vive en Argentina—, luego de una serie de encuentros de mediación que culminaron en un entendimiento.
El consenso se formalizó durante una audiencia realizada en el Centro Integral de Métodos Autocompositivos de Resolución de Conflictos (CIMARC) de Bariloche, con la participación de ambos progenitores, la Defensa Pública y una mediadora oficial.
La base de la cuota fue fijada tomando como referencia el monto vigente del Salario Mínimo, Vital y Móvil, y se acordó que el valor será revisado periódicamente, de acuerdo con los gastos derivados de la crianza de la adolescente.
Durante el proceso, los padres también acordaron aspectos relevantes como la autorización para viajes inte acionales y la modalidad de contacto entre el padre y su hija en adelante.
Antes de alcanzar el acuerdo, la madre —que vive junto a su hija en la región Metropolitana de Santiago de Chile— había iniciado gestiones ante el consulado argentino para obtener un defensor en Bariloche e iniciar un juicio, trámite que finalmente no fue necesario gracias a los resultados de la mediación.
En el proceso se destacó el compromiso de la madre, quien ha sostenido la crianza de manera constante, asumiendo las responsabilidades cotidianas más allá de los aportes esporádicos del progenitor.
El acuerdo permitió evitar un proceso judicial y garantizar una solución basada en el diálogo, priorizando el interés superior y los derechos de la adolescente, además de demostrar la eficacia de los métodos autocompositivos para resolver conflictos familiares inte acionales













